Cualquier lectura es válida para este empate sin goles contra Banana que quedará en la historia (?) por ser la primera vez que se da ese resultado. Optimistas pueden decir que el empate se rescata, que el punto nos mantiene en la 5ta posición y lo deja a Banana, nuestro rival debajo nuestro, pesimistas pueden decir que el punto es de conformistas y que estamos para mucho más.
Yendo al partido, arrancamos con mucha presión y con deseos de proponer el partido en su campo. Eso duro pocos minutos porque en cuanto Banana encontró la pelota no tuvimos más que retroceder y ordenarnos para que no nos agarren mal parados. Lentamente el partido se convertía en uno de ajedrez, no se arriesgaba, se jugaba poco, se metía mucho y se corría mucho más. A los 20 del primer tiempo Oso dijo basta, pidió el cambio y con Mati en el banco se buscó su ingreso para darle más órden y equilibrio a un equipo que estaba partido en dos y que ya ni la pelota tenía y lo único que hacía era defenderse. Con Nacho como único delantero armamos un 4-4-1-1 con Martín un poco más suelto y con la intención de que el juego se genere desde los pies de Panqui, Mati y Martín. El Pacha tuvo la más clara del primer tiempo en un mano a mano que fue a las manos del arquero. La defensa no tuvo sobresaltos y con todos estos factores, el 0 a 0 era evidente.
Salimos el segundo tiempo a buscar un poco más. Ellos ya habían mostrado su mejor juego y no les alcanzó para convertir y en la medida que nosotros no apretaramos el acelerador el marcador no se iba a cambiar. Con esa idea y la de los volantes aportando más llegada. Total atrás teníamos una defensa que siempre estuvo bien parada y nuestras salidas imprecisas eran su arma más peligrosa en ataque.
A los 15 del ST se volvió al esquema tradicional optando por la búsqueda de los 3 puntos. Pipa que entró por Rolo tuvo la situación más clara en sus pies. Esquivo al arquero e inexplicablemente definió torcido. Por muy poco no fue gol. Con el cansancio de los dos equipos el partido se tornó en un ida y vuelta que daba la pauta de que el que hacía el gol ganaba. Ellos tuvieron dos situaciones clarísimas, Nico se lució en una -y ya van...- y en otra el delantero rival definió cruzado muy cerca del palo. Quedaban escasos minutos y la más clara nuestra sobre el final fue de Nacho que consiguió sacarse un tipo de encima y definir un bombazo que en otra época hubiera entrado.
Fue 0 a 0. Empate justo en un partido cambiante. El equipo se exigió mucho y mantuvo el arco en 0 que es lo más importante. Fue importante la entrada de Mati que, si bien le costó meterse en sintonía con el partido, le dio más oxígeno al medio campo que se encontraba partido y sin ninguna respuesta. Todavía falta generar más juego en equipo, tocar más, animarnos más con la pelota y juntar gente en la ofensiva. Cuando poblamos el medio con 5 volantes lo que más tenemos que tener es alternativas de pase. Hubo jugadas en las que Chinco se vio obligado a tirarla de puntín para arriba porque no tenía a quién darsela. Es cierto que dijimos de armar el equipo de atrás para adelante pero ahora necesitamos que lleguen los goles, que aquellos de los que se esperan goles empiecen a meter porque nuestros 15 goles en 10 fechas nos ubican como el segundo equipo -con otros tantos- que menos goles hizo en el torneo. Por otro lado sorprende el estado físico de unos cuantos, más aún sabiendo que en la máxima categoría se necesita un equipo con piernas durante los 90 minutos.
Dejemos el empate en el pasado, olvidemosnos que sacamos 1 punto de los últimos 6. A Cachaca le falta disfrutar más los partidos. Los juega a cara de perro porque se cree que por poner la pierna hay que estar enojado con el compañero. También se puede jugar lindo y también se puede disfrutar. Es cierto que perdiendo nadie disfruta pero lo más importante durante el partido es la concentración, el optimismo, la cabeza arriba y la paciencia. Todas estas cosas reinan por su ausencia. El individualismo juega más que el sentido del equipo y cuando no se gana lo que más se necesita es un equipo que en su cabeza está bien, porque sabe que juega bien independientemente de que sean 4 , 5 o 11 los volantes. Hay una cosa que es cierta y que todos sabemos es que el cambio de nombres y de estrategia no tiene porqué cambiar la forma de jugar ni nuestra actitud. Tener 5 volantes sirve para tener más la pelota y que no te duplique el rival a la hora de atacarte. La responsabilibidad de manejar los hilos del partido sigue siendo de ambos 5 y enganche, como así también la de los laterales en sumarse al ataque, o la de volantes externos en tirar una diagonal. Insisto eso es así sea la táctica que sea.
Entonces, entendamos que no podemos medirnos por los resultado. Que si Pipa o el que fuera hubiera metido la que tuvo estaríamos hablando de otra cosa, como pasó con Febo y ZZ cuando Rafa y Rolo metieron un gol en la última jugada. Que empecemos a mirar más las cosas positivas que no vinimos de excursión a la A porque tenemos un equipo que le da para mucho más, pero que es cuestión de que cada uno cambie su mentalidad y salga a la cancha con esa idea.
He dicho.
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