lunes, 12 de julio de 2010

Cachaca 2 (4) - Banana 2 (5) (cuartos de final)

Golpe a la Ilusión

Puesto que no podía ser de otra manera, el mismo equipo que viste la albiceleste no iba a ser la excepción y en cuartos de final dijo siamofuori de la copa y chau a la ilusión de creernos los mejores. Encima como si fuera poco, más de una agarró el manual mufasa e hizo todo para transformar lo que parecía una victoria desde el punto de penal en una derrota de esas que duelen y te dejan enfermo durante 4 días, con angina, placas, sin comer, viendo absolutamente todos los análisis de la final y sin moverme de mi cama.


Cachaca pudo haber sido semifinalista, estuvimos dos veces en ventaja y la bronca principalmente se da a partir de que no supimos mantenerla. Tanto en el comienzo del primero como en el segundo tiempo hicimos un esfuerzo único, nunca vi al equipo tan metido, tan decidido en ir a buscar un partido. Se notaba en el constante aliento de los 11 de adentro y los que bancaban desde afuera, ese mínimo detalle nos empezó a ser dominadores del partido y después en el juego eso también pudo verse. La clave estuvo en el movimiento y en el toque corto. Obviamente eso trajo su premio, el gol, pero en ambas etapas el gol fue un objetivo corto placista y no hubo respaldo para lo que quedaba y así fue como nos empataron dos veces, la primera inmerecidísima, de la forma que más nos duele: de pelota parada. Nos confiamos en que Pipa iba a llegar a cortar el centro, cosa que no ocurrió, y el jugador más fachero de toda la cancha cabeceó solo sin marca con el arco a su merced. El 2 a 2 nos agarraron mal parados en dos o tres toques apareció por el medio uno de ellos y definió a un palo.


En resumen del partido hago la siguiente lectura: arrancamos muy bien, a partir de ganar el medio dominamos el partido, Nacho hizo un gol después de una buena jugada colectiva que se dio gracias a un no despeje de un defensor de ellos, minutos después nos empatan de la nada, no pudimos jugar con la ventaja, terminó el primer tiempo parejo, mucho más disputado de que lo había empezado. Arrancamos el segundo tiempo como el primero, con todo. Volvimos a ganar el medio y se agigantó nuestra defensa, fundamental para cortar a tiempo y para achicar los espacios. Gol de penal pero todavía quedaba mucho. Nos fuimos quedando, el medio cada vez estaba más desarmado y en ofensiva Nacho y Oso estaban en otra sintonía, los defensores sacaron cuanto pudieron, pero Banana cada vez se acercaba más y sumaba más gente en ataque, no pudimos aprovechar un par de contras y faltando 10 nos empataron.


Después los penales, Martín, Marcos, Panqui y Mati atroden, Pipa ya había atajado uno, si Nacho metía el suyo ya estábamos, pero antes debíamos saludar a los rivales, pero antes debíamos decir que el fideo estaba cagado, pero antes debíamos decir tantas cosas que inexplicablemente hicieron que la situación se vuelva desfavorable, Nacho erró, el 6to de ellos fue adentro, pateo Pipa, atajó el arquero y nos quedamos con las manos vacías.


No estoy de acuerdo con aquellos que al terminar el partido dijeron que jugamos pésimo, seguramente de haber ganado en la lotería de los penales nadie se hubiera percatado de lo que pasó, no podemos caer en el exitismo de sentirnos los peores, llegamos hasta esta instancia porque lo merecimos y nadie nos regaló nada, jugamos de igual a igual contra un rival de una categoría superior, de todos los rivales que nos tocó jugar me parece que fue el equipo que más nos exigió, incluso más que Darrospide o el mismo Febo, y además hicimos un desgaste bárbaro, por ahí nos faltó resto físico y eso habla muy mal de nosotros que con 20 años corremos menos que ellos que promediaban los 30 años de edad.


Pero sabíamos que este torneo no otorga ningún beneficio, lo nuestro es la B y ya tenemos que estar pensando en lo que se viene, el partido más importante hasta el momento, la posibilidad ideal para descontar puntos y reacomodarnos arriba, Vamos Cachaca que acá no pasó nada, les juro que si mantenemos, al menos, las ganas de los primeros minutos vamos a poder seguir haciendo historia.

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