Lo curioso es que se habló en el inicio de ganar para salir campeón, por los rendimientos que habíamos tenido hasta ayer parecía que lentamente el equipo se iba aceitando y que nuestro estilo se iba haciendo presente. Pero además de estar faltos de ritmo por el parate de 3 semanas, la realidad es que fuimos un equipo que distó de mostrar sus intenciones de campeonar.
Rezongones, puteadas, brazos en jarra, murmullos, cabeza gacha. Los primeros 45 fueron un desastre, nos hicieron 3 goles por errores pelotudísimos que ni en la época de Leo Casciaro de cocapri nos los hacían. No hay porqué recaer en culpas personales, no hay porqué decir éste gol se lo comió tal y este otro éste. Pero lo cierto es que tuvimos errores conceptuales muy graves y en esto cada uno tendrá que hacer su autocrítica. Querer salir jugando para el medio, avanzar descaradamente, cambiar posiciones sobre la marcha entre otras cosas, creernos mejor que el rival, pensar que solo puedo ganar el partido y podría seguir.
El primer tiempo provocó dolor de ojos, las dos veces que nos acordamos de jugar, provocamos peligro, aprovechamos los problemas que tenían ellos en defensa y fundamentalmente nos sacamos la personalidad de estrellita que tiene cada uno, que poco sirve y que tan mal le hace al equipo.
Mientras tanto veíamos como ellos barrían, iban a morir a cada pelota, ganaban todas las divididas, y encima sabían aprovechar nuestros errores infantiles.
Si hay un problema que tiene Cachaca es que equipos como éste complican más que equipos que te salen a jugar de igual a igual. Entonces, como se dijo en la previa, hay que reveer la forma de encarar estos partidos, si se nos meten atrás nosotros atacamos por afuera y tiramos centros y 4 tipos por lo menos tiene que haber en el área. Si la pelota no llega a los delanteros, no son los defensores los que se tienen que encargar de hacersela llegar, para eso tienen que aparecer los volantes para hacer las veces de nexo y para eso los delanteros se tienen que mover por todo el frente de ataque y bajar unos metros si están bien marcados.
No me canso de hablar de la teoría de futbol, algo que no deberíamos tener tan en cuenta. Nosotros sabemos que con la pelota al piso, con mentalidad ganadora y CON ACTITUD nos alcanza y nos sobra para pelear arriba y porqué no para salir campeones.
La derrota llega en el momento justo, estamos a solo 3 puntos de la punta y van solo 5 fechas jugadas. Si no cambiamos ciertas actitudes esto será lo mismo que vivimos el año pasado la primera ronda. Tampoco es la muerte de nadie, duele perder y más, como dije más arriba de esta manera. Por lo menos las ganas en el segundo tiempo se hicieron un poco más presentes, pero cuando nos acordamos de ir a buscarlo, ya estábamos 3 goles abajo y con 45 minutos menos. Y como siempre pasa, cuando lo vas a buscar, llegás 4 veces, hacés un gol, pero ellos llegan una (o nosotros los hacemos llegar una vez) y te clavan. 4 a 1 espantoso por donde se lo mire y chau.
Valoro la buena onda que le pusieron todos a la derrota, creo que daba para cagarnos a trompadas entre todos por lo mal que jugamos pero fuera de la cancha el clima siempre fue el mejor y por lo menos eso es lo único que hay que mantener. Si hay algo lindo que tiene el futbol es que da revancha SIEMPRE, y por eso el domingo mostraremos -espero- que lo que pasó ayer fue tan solo un tropezón.
uno x uno
Cayo (3)
El partido más dificil lo tuvo él, porque la tuvo que ir a buscar 4 veces adentro. El problema principal más allá de los goles es que no transmitió la seguridad de otras veces, y cuando se ve que el arquero no está seguro pasan las cosas que pasaron.
Marcos (3)
Con la claridad de siempre para llevar la pelota, pero con errores infantiles propios de su velocidad que lo hace perder su estilo, lo hace volverse impreciso y lo hace mandarse las cagadas que se mandó.
No pudo ni supo parar la defensa y empezar a armar juego desde el fondo. Los volantes hacían agua y el tenía que salir a cortar a mitad de cancha, dejando huecos en la defensa. El tercer gol llega por un error de no sobrar él siendo último hombre.
Huevo (4,5)
Un primer tiempo muy pobre como segundo central, con Largo nunca se llegó a entender, no sabía si sobrar, si revolear, si trasladar y estuvo flojo en la marca. En el segundo repuntó haciendose cargo de la pelota como volante central y tratando de armar juego de la mejor manera posible.
Cabeza (4,5)
Nunca pudo hacerse presente en ataque. Lo dejaron muy solo en la marca y pagó más caro que nadie porque fue el primero que salió cuando no debía haber salido. Se valora y se agradece la buena predisposición.
Rafa (3) amarilla
Empezó de volante con buen ida y vuelta pero cuando se reclamaba más compromiso con la marca era poco lo que se veía de él. Después pasó a jugar de delantero pero el equipo estaba tan cabizbajo que no tuvo participación y en el segundo tiempo como tercer delantero, se clavó contra una punta participando en la ofensiva, pero sin tener la movilidad que se dijo que se quería de una punta a la otra, alternando con Rodrigo y Nacho.
Mati (4,5)
El equipo sintió mucho su mal trato con la pelota en todo el primer tiempo. Tuvo errores que se pagaron caro por culpa de trasladar tanto la pelota aunque en defensa de él es cierto que siempre tuvo nulas alternativas de pases. En el segundo tiempo se mostró abierto por la derecha pero lo contuvieron bien y fue poco el juego que tuvo.
Rolo (4)
Sin ningún compromiso con la marca tuvo un primer tiempo pobre, porque cuando el equipo no tenía la pelota él no sabia que hacer. Después pasó arriba y puso un poquito más pero su rendimiento estuvo a la altura de lo que mostró el equipo ayer.
Martín (4)
Por el medio lo tomaron bien y el tuvo que echarse a las puntas tratando de aparecer sorpresivamente. Nunca pudo agarrar la pelota en tres cuartos para jugar en la ofensiva, y su juego fue intermitente.
Pipa (3,5)
Ni 8, ni delantero, ni punta ni nada. Producción flojísima, desentendido con el equipo, sin pesar en ataque, sin apretar las salidas y con poco para hacer.
Nacho (4)
Buscando la jugada heroica que nunca llegó. Cuando se dio cuenta que no le salían y cuando más el equipo lo necesitaba, dejó de echarse unos metros atrás, dejó de pedirlas todas, dejó de ser referencia en el área y se dedicó a buscar el penal que nunca fue.
Buga (5)
En medio de una bajeza futbolística, fue el que trató de poner paños fríos , agarrar la pelota e ir siempre para adelante. Sorprende su parsimonía para no desesperarse cuando las cosas no salen pero que tampoco contagia nada dentro de la cancha.
Chinco (5) amarilla
Dificil entrar como líbero en una defensa de 3 que tiene como obligación, sacar la pelota rápido del fondo y empezar a jugar por abajo. En medio de la desesperación y del mal clima dentro de la cancha, el trató de darle el equilibrio a un equipo que durante el primer tiempo lo extrañó mucho.